L@s perr@s no son personas...aunque queramos creer que sí.

 Hola a todos, me llamo Juan Luis García, y me gustaría compartir con vosotros lo que he aprendido sobre l@s perr@s y como conseguir un equilibrio y una relación armoniosa y feliz con ell@s.

Esta primera entrada la he titulado "L@s perr@s no son personas... ", porque creo que es la causa principal de desequilibrio y de la mayoría de los problemas que tenemos con "nuestros"animales y que nos pasa o ha pasado a la mayoría. Y pongo "nuestros" entre comillas porque también creo que es otra idea equivocada que solemos tener, y es el de pensar que otro ser vivo puede ser "nuestro" o nuestra propiedad, cuando en realidad todos somos seres libres y lo más correcto sería verles como compañeros que comparten un tramo de nuestras vidas, y debemos estarles muy agradecidos por todo lo que nos dan y por su amor incondicional.

L@s perr@s no son personas, aunque queramos creer que sí, y pensemos cosas como: "es que parece que me entiende cuando le hablo"...o : "mi perro es especial, no es un perro como los demás"...
Entiendo perfectamente esto, y a mi también me ha pasado, pero he aprendido que no les hacemos ningún favor tratándoles como personas, ya que no estamos atendiendo una necesidad suya, sino más bien nuestra, y lo que hacemos es volcar en nuestro compañero necesidades emocionales  que no hemos cubierto, como querer tener un hij@, una pareja, un amigo etc...
El animal que comparte su vida con nosotros tiene otras necesidades diferentes y que normalmente no
cubrimos, bien por ignorancia nuestra, o bien porque no queremos hacer el esfuerzo que requiere.

¿Y cuales son estas necesidades?


Pues son básicamente 3, y ESTE ORDEN:
1- La primera y en mayor proporción que las otras dos: EJERCICIO.
L@s perr@s son animales  que en su estado natural hacen gran cantidad de ejercicio y necesitan quemar esa energía que tienen o sino la quemarán haciendo otras cosas menos deseables, como ladrar a todos y a todo, obsesionarse con cosas, dar vueltas, subirse a todos lados etc.
El ejercicio más recomendable y que tendrá mejores efectos en el animal serán los paseos con nosotros. Al menos necesitan dos paseos de 30 minutos al día para estar sanos y equilibrados.
Y como deben de ser estos paseos?
Deberán ser paseos en los que reforcemos nuestra relación con ellos, que deberá ser así:
YO SOY EL/LA LÍDER, TU ERES EL/LA SEGUIDOR/A.

En las manadas de perros siempre hay un líder y el resto son seguidores, y así es como debe ser para qué haya armonía y paz, y es algo que todos los perros entienden. Pero lo más habitual en "nuestra manada" es que el animal sea el que manda, y por lo tanto el/la líder, y nosotros los seguidores, y eso tiene todas las consecuencias que podría tener...
Y como se consigue esto?
En primer lugar la forma en la que salgamos con el animal de casa es importante. Lo que suele pasar es que el animal sale en primer lugar como una bala, y nosotros detrás con el brazo a punto de desprenderse del resto del cuerpo...y esto ya le está diciendo al animal quien es el/la que llevara las riendas en el paseo y quien es el/la líder.
Así que siempre, siempre, siempre, debemos salir nosotros en primer lugar y cuando el animal esté en un estado tranquilo y sumiso.
Para ello le ataremos la correa lo más cerca posible a la cabeza, (los arneses y correas extensibles no son recomendables, sobre todo sí es un animal con mucha energía y que "tira mucho") y le daremos tirones cuando intente adelantarnos o tenga algún comportamiento que no deseemos. No actuáremos con violencia ni agresividad, eso es muy contraproducente y un / una líder de la manada nunca haría algo así, eso seria signo de debilidad, y nunca siguen a un líder débil.
Nuestra energía debe ser una energía firme y tranquila, y la correa debe de ir suelta, sin tensión por nuestra parte mientras no se produzca algún comportamiento que tengamos que corregir. Llevaremos la cabeza alta y el paso firme y decidido. Con una energía nerviosa no podemos tranquilizar otra energía nerviosa.
Y así seguiremos el resto del paseo. Nosotros siempre iremos delante o al lado, y cuando intente adelantarnos le corregiremos con un tirón hacia un lado, firme, pero sin agresividad. Esto supondrá un ENORME cambio, que nos encaminara hacia la relación que siempre hemos deseado con el animal, y hacia el comportamiento que siempre hemos deseado en el / ella.